24 sept 2018

UN DOS TRES...

Ella era auténtica y un tanto cícilica, quienes lograban conocerla entendían a la perfección cuál sería su estado sólo al verla, como si la conocieran desde lo más profundo de su ser.

Merodeaba todas las noches con dulzura, dejando a su paso suspiros, anhelos, deseos y sueños. Para muchos era difícil resistirse ante su presencia, hasta los más esquivos tenían un momento para observarla pasar.

Algunas veces se dejaba cubrir con un velo mientras recorría sus pasos sin cesar, una danza que ella conocía de siempre, desde que tenía uso de razón, un dos tres, un dos tres, un dos tres era el repicar del movimiento.

Otras veces, salía a caminar en puntillas con su traje oscuro, casi imperceptible, furtiva y ensimismada, continuaba su danza sólo para ella, para si misma, disfrutando desde su suave mirada el paisaje que la ignora, es divertido que no la vean, aunque sabe muy bien que se hace sentir. Cada uno de ellos sentiría su atracción constante en cada partícula de agua remanente en sus cuerpos, siempre había sido así, eso la divertía y la llevaba a sonreir pícaramente: esas sonrisas como de película.

Un dos tres, un dos tres, un dos tres...

Esa noche salió sin misterios, se dejó ver como era: hermosa, completa, brillante... Su danza podía ser vista por todos quienes la observaban con una leve obsesión, todos se rendían a su paso y ella sabía muy bien que era magnética e imponente. 

Un dos tres, un dos tres, un dos tres...

Recibió halagos, amores, cartas y poemas. Provocó suspiros, sueños y propuestas. Era ella, la misma que danzaba en la oscuridad y en la luz, siempre presente, siempre bella.

Ella hoy era la Luna y estaba Llena.

5 comentarios:

Unknown dijo...

Linda narración de lo que pasa por tu cabeza.

Unknown dijo...

Excelente

Jorge Ernesto Avila dijo...

Pensé que sería una gatita renga! Me engañaste con el "un dos tres". Lo que hace mi mente... Deje una gatita mocha. Muy buena historia. Me encantó.

Isajita dijo...

Gracias por pasar!

Mauro Vásquez dijo...

Muy lindo relato. ¡Felicitaciones!