No es una grata sensación, no sabe lo que sucede, no sabe porqué sucede, sólo ve un punto negro ahí, en medio de tanta luz.
Todo fluye, las cosas inesperadas resultan, la buena vibra está latente, pero algo falta. Se pregunta constantemente "¿Donde estoy?".
Se siente cansada, no quiere seguir siendo fuerte, quiere llorar y patalear por el biberón, preocuparse únicamente por tomar notas y pasar las materias, quiere vivir de las ciencias exactas y darse cuenta de que todo tiene una razón, un motivo y que no tiene que pensarlo más... Quiere sacar dieces sin esfuerzo, quiere volver a saber más que el resto y enseñar...
Quiere mimos... quiere que la hagan reír, quiere dedicación, ternura y compañía... quiere compartir lo que tiene para dar, quiere tener un nuevo propósito y vuelve a preguntarse "¿Donde estoy?".
Quiere dejar de sentirse en el bosque de la China, tener la mente en blanco, quiere saber en donde está todo el esfuerzo que hizo, encontrar el reconocimiento porque no quiere esforzarse más.
Quiere saber tantas cosas pero quiere certezas, no relatividades...
Quiere montarse de nuevo en un columpio para sentir la brisa, observar la luna y dejarse llevar por la sensación que tanto anhela...
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